Visitar la ciudad de Pau

La ciudad francesa de Pau es una auténtica maravilla y está repleta de encanto. Hay dos partes claramente diferenciadas por su estructura, por sus calles, en definitiva, por todo, por un lado se encuetra la ciudad vieja de Pau, que posee una historia inmensa y por otro la ciudad moderna de Pau, que a pesar de que no tiene tanta historia, es igualmente preciosa.
La ciudad vieja de Pau se encuentra junto al palacio de Pau. És muy sencillo diferenciarla, porque si vas caminando por la calle ves que de repente las amplias aceras se convierten en estrechas callejuelas y los enormes y lujosos edificios se transforman en pequeñas casitas de uno o como mucho dos plantas que parece que están llenas de magia. Esta parte de la ciudad me recuerda bastante a las calles que nos podemos encontrar en otras ciudades francesas como Carcassone.
Esta zona está muy bien cuidada y se han intentado conservar todo lo posible todas las edificaciones.
Además de las preciosas casas antiguas en este barrio hay también una antigua iglesia realmente preciosa y, por supuesto, el castillo de Pau, que está justo en el centro de la ciudad vieja y al ser tan grande se puede contemplar desde la distancia.
Es una zona especialmente indicada para pasear y para comer o cenar en alguno de los encantadores restaurantes que hay por sus calles.
¡Ah! Se me olvidaba, una de las cosas que más me llamó la atención de las casas de esta zona son las chimeneas que tienes. Son chimeneas de ladrillo que nunca antes había visto, preciosas, de verdad.
Por cierto, por esta zona de la ciudad pasa el río y las orillas están completamente cuidadas, así que se pueden dar unos magníficos paseos.